Gracielita es una muñeca creada por la fabricante de muñecas argentina Eidema, propiedad de Eduardo González, que la lanzó al mercado en 1953. Inicialmente medía 55 centímetros y estaba fabricada en pasta, con articulaciones en cabeza, brazos y piernas. Con el paso de los años se fabricaron modelos en otros tamaños, de 52 y 60 centímetros. Sus ojos son azules y basculantes y su pelo es una peluca pegada a la cabeza de cabello natural o sintético. Se fabricaron modelos normales y con mecanismo andador.
La muñeca representa a una niña de clase media de la época, con un amplio guardarropa para vestir conjuntos apropiados para cada ocasión, que podían adquirirse por separado. Entre ellos se encuentran vestidos cortos y veraniegos, lisos o estampados, conjuntos de blusa y falda corta o pantalón, abrigos, ropa de baño o vestidos más especiales, como el de bailarina o primera comunión. Cabe añadir que contó con diversos accesorios, así como mobiliario de gran calidad, como los muebles de su dormitorio (cama, cómoda, armario), de la sala de estar (mesa y sillones) e incluso un piano.
En cuanto a su cabello, podía ser de diversas tonalidades, como el color caoba o el rubio intenso, a pesar de que había otros como el negro. La melena solía ser corta y con bucles, aunque también podía ser lisa y ahuecada o más pegada a la cabeza. También era común encontrarla con recogidos, como un moño atado con un lazo o bien trenzas, ya sean dos a cada lado de la cabeza o una sola cayendo en cascada.
En 1954 se producen cambios técnicos y la composición de la muñeca varía, ya que la cabeza pasa a ser de plástico rígido, mientras el cuerpo sigue siendo de pasta. Este modelo no duró demasiado, puesto que, en 1955, pasa a ser fabricada enteramente en vinilo, por lo que es publicitada como una muñeca irrompible. En 1963 empieza a fabricarse en plastisol, un plástico más ligero pero que sigue siendo resistente y la hace más suave al tacto y realista.
Esta muñeca, caracterizada por su cara alegre, contó con dos tiendas propias, una de ellas muy próxima a las de Marilú y Mariquita Pérez, las muñecas de mayor éxito en el país. Tanto en estos locales como en otras jugueterías era objeto de escenas pintorescas en los escaparates; incluso una niña llamada Graciela Vázquez publicitó a la muñeca.
Gracielita tuvo mucho éxito durante los años 50, convirtiéndose en una rival potencial para Marilú, una muñeca mucho menos accesible por su precio. De hecho, la muñeca de Eidema fue creada para poder llegar a familias con un poder adquisitivo inferior. Tuvo una amplia cobertura publicitaria en todos los medios de la época, tanto la prensa infantil como programas de radio y televisión. Fue una sensación entre el público de menor edad y supo sobrevivir a su competidora, en un contexto en el que las muñecas de plástico se impusieron en el mercado, y siguió fabricándose hasta 1966.
En definitiva, Gracielita es una de las muñecas argentinas más populares de mediados del siglo pasado, bastante difícil de encontrar a día de hoy. Los modelos que más éxito tuvieron fueron los de vinilo, por lo que son los que menos cuesta adquirir.
Steffi Love es una muñeca creada por la juguetera alemana Simba, que la lanzó entre mediados y finales de los años 80, aproximadamente. Está fabricada en plástico, mide 29 centímetros y presenta articulaciones en cuello, brazos y piernas; sin embargo, hay algunos modelos que cuentan con ellas en codos, rodillas, cintura, etc.
Los primeros años son bastante caóticos y confusos. Inicialmente se llamaba simplemente Steffi, y tenía una cara muy particular, con una sonrisa muy amplia, nariz ancha y ojos grandes, que le confieren una expresión pícara y pérfida. Lo curioso es que, en las imágenes de las cajas, las muñecas que aparecen no tienen esa cara, sino una más seria y parecida a la de la primera época de Karina, otra muñeca alemana. Además, los peines que incluían tenían la marca de Ocean Toys, una fabricante de la que poco se sabe, pero que estuvo involucrada en la fabricación de Steffi en este momento. Este modelo es prácticamente imposible de encontrar, por lo que su producción debió ser breve y con una acogida más bien discreta.
A finales de los 80, tal y como se documenta en 1988 (aunque quizá ya se producía en 1987), la cara de Steffi era igual a la de Betty Teen de Tong, una sociedad chino-estadounidense que se enriqueció a base de vender esta muñeca, además de proporcionar el molde a numerosas empresas de todo el mundo. Su rostro es serio y dulce a la vez, con boca cerrada, ojos grandes y redondos (normalmente azules) con pestañas pintadas y "reales". Se trata de un modelo difícil de encontrar y solamente podréis verlo con claridad, en esta entrada, en la imagen 10. Esta versión convivió con otros modelos coetáneos, tal y como muestran catálogos de 1988, donde se le ve con un modelo también serio, pero que expresa una tímida sonrisa y tiene un aspecto más dulce y cándido. Los labios son gruesos pero de color suave, tiene nariz achatada y bonitos ojos rasgados con pocas pestañas pintadas, además de unas cejas marrones finas y poco arqueadas. Además, en ese mismo momento también existe un modelo totalmente sonriente, que muestra los dientes y tiene hoyuelos en las mejillas, con una expresión muy alegre.
En este periodo Steffi cuenta con novio, llamado Danny o Danny Love, que tiene el pelo moldeado y pintado en el plástico. Además, se puede presentar en modelos sencillos o en pack con su novia, como es el caso de la edición de boda. Cabe añadir que ya tenía dos bebés, un niño y una niña, que completaban la familia. En cuestión a vestuario, Steffi viste ropa moderna para la época, más sofisticada o juvenil, además de vestidos pomposos. También tuvo numerosos accesorios, como mobiliario de jardín, baño, cama, coche cabriolet, máquinas de gimnasio o elementos para el cuidado de sus hijos.
En 1990 la muñeca experimenta cambios faciales y ahora, además del segundo modelo que he mencionado, de mirada dulce formada por ojos rasgados, se presenta con un rostro sonriente, pero distinto al que hubo a finales de la década anterior; ahora la sonrisa parece forzada, puesto que los labios constituyen líneas rectas, por lo que tiene una expresión bastante extraña, y los hoyuelos también son un poco discordantes. También hubo algún modelo especial como el Melody, con un molde totalmente distinto, más sereno, de boca cerrada con labios carnosos.
En 1992, Steffi vuelve a cambiar a nivel facial, con una cara seria, de boca cerrada y labios pintados en tonos más llamativos, nariz ancha, ojos azules o marrones con pestañas negras a los lados y, como uno de los rasgos más distintivos, sombra de ojos, normalmente azul. A partir de este momento, el cuerpo de la muñeca siempre tiene la cintura articulada. Cabe añadir que Danny siguió acompañando a Steffi, así como los bebés, pero en 1994 apareció Kevin, un chico con una cara totalmente diferente y pelo real. Lo curioso es que en los catálogos de aquel año aparecen ambos, pero al año siguiente ya no está Danny.
Durante la década de los 90 la cantidad de modelos y complementos se dispara, lo que indica que su popularidad fue elevada, por lo que Simba decidió centrarse en esta muñeca y tener una producción prolífica. Además, entre mediados y finales de esa misma década, apareció Evi, la hermana pequeña de Steffi, que representa a una niña en edad preescolar, así como Sarah, otra hermana suya, en este caso una niña preadolescente. La primera tiene una cara muy dulce, redonda y mofletuda, boca ligeramente abierta, nariz ancha, ojos azules redondos con pestañas negras en la parte superior de estos y cejas marrones finas. Sarah, que solía presentar diversas articulaciones, tiene la cara alargada y su boca muestra los dientes. Ambas tuvieron numerosos amigos, así como accesorios, en el caso de Evi.
A comienzos de los 2000, sobre 2003, Steffi se renueva por completo y presenta un nuevo molde facial, muy distinto del anterior. Ahora su cabeza es más ovalada, y su cara se caracteriza por una boca con labios pintados y sonrisa discreta, nariz ancha, ojos grandes con pestañas finas y sombra, además de cejas marrones finas y arqueadas. Cabe añadir que, sobre mediados de los 2000, Evi, la única hermana de Steffi que siguió en el mercado (Sarah tuvo una andadura bastante breve y es difícil de encontrar), también cambió de aspecto; ahora su cara parece menos de bebé, aunque sigue siendo muy dulce. Además, aparece un amigo suyo (aunque anteriormente ya se comercializaron, pero sin nombre propio): Timmy. También sigue a la venta Kevin, con pelo moldeado y pintado sobre el plástico desde finales de los 90. A lo largo de estos años, la cantidad de modelos y accesorios producidos no ha dejado de crecer.
Steffi Love fue una muñeca de éxito relativo en sus comienzos pero, llegada la década de los 90, eclosionó su fama, tanto en su país natal como en el resto de países europeos a los que fue exportada, especialmente en los que recientemente habían abandonado el bloque comunista. En España está disponible desde comienzos de los años 90, aunque nunca ha tenido una fama arrolladora. Su popularidad en Alemania se sitúa en un contexto en el que la muñeca originaria de ese país de mayor éxito, Petra, a comienzos de esa década entró en decadencia (de hecho, no tardaría mucho en desaparecer), así como Karina, que dejó sus años de gloria atrás. Por este motivo, la única muñeca que le hacía sombra era Barbie, muy afianzada en el mercado alemán. Steffi pretendía competir con ella gracias a sus precios más económicos y también a numerosos conceptos similares (seguramente veréis muchos modelos que son más que parecidos a los de la muñeca americana), y así ha seguido haciéndolo, aunque fue en la última década del siglo pasado cuando lo hizo con más fuerza. En los últimos años, tras la expansión intercontinental de Simba, ha llegado a los países de América Latina, donde ha cosechado mucho éxito, así como la India, entre otros.
Esta muñeca es una de las más populares de producción alemana, así como la de Simba por excelencia. Aunque son muchos los que la consideran una copia barata, ha llegado a tener personalidad propia y tanto pequeños como mayores disfrutan con ella. De hecho, existe un amplio sector de coleccionistas adultos de esta muñeca, así como de sus familiares y el universo que la rodea. Lo curioso es que, a pesar de su popularidad, existe muy poca información sobre ella, lo cual hace su historia más complicada de conocer, a la vez que interesante.
(finales años 80 - 1991)
(yo tuve a esta muñeca de encima, con vestido azul y cuna)
(1992 - principios años 2000)
(raro modelo de transición, con molde nuevo, aunque no es el que se implanta definitivamente, y molde antiguo en la imagen de la caja)
(otro modelo de transición, en el que se ve al muñeco con nuevo molde, mientras en la parte trasera aparece el anterior)
Os dejo el anuncio más antiguo que he encontrado, de 1993:
A continuación, uno emitido en Francia en el 2000:
Este es de principios de los 2000, aproximadamente:
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No quería terminar esta entrada (sí, sé que se está haciendo un poco larga...) sin enseñaros una muñeca curiosa: Pamela. Esta muñeca, también fabricada por Simba, mide 17 centímetros y posee 10 puntos de articulación (cabeza, hombros, codos, cintura, muslos y rodillas). Cabe añadir que el cuerpo fue fabricado por Ocean Toys, lo cual termina de reforzar la teoría de las relaciones entre ambas empresas, por lo que esta tuvo bastante que ver en la producción tanto de Steffi como de Pamela.
Pamela apareció a finales de los 80 aproximadamente y antes de terminar esa década o ya iniciados los 90 su nombre cambió y pasó a llamarse Pamela Love; además, tuvo tres caras diferentes. Contó con un novio, Bobby (o Bobby Love) y se vendió en algún pack con su familia, que se deduce que son sus hijos. Se crearon diversas colecciones de ropa a la moda de la época y podía adquirirse por separado. También tuvo algunos complementos.
Pamela Love fue una muñeca de cierto éxito en su Alemania natal y cuando más fama tuvo fue a principios de los 90. En 1993 seguía produciéndose, pero a mediados de esa década deja de hacerlo. Actualmente tiene muchos seguidores, sobretodo en los países eslavos y Rusia, donde hay numerosos coleccionistas que la aprecian. Hoy en día son joyas de coleccionista raras que alcanzan precios altos. En España también estuvo disponible, aunque pasó desapercibida. Parece ser que Simba la convirtió en una versión en miniatura de su muñeca estrella, Steffi Love.
Os dejo una foto casera en la que se ve la caja de mi muñeca Evi. Es de Nochebuena de 2001; fue uno de los detalles que nos traía "Papá Noel" por la noche, antes de que tuviéramos el resto a la mañana siguiente. La verdad es que no recordaba haberla tenido, era muy pequeña, incluso llevaba chupete:
Mi Evi fue la del vestido azul y con dos coletas. He podido averiguarlo gracias a otra foto en la que se ven los juguetes de mi habitación, entre ellos la cuna, con la tela de ese mismo color. No sé si tuvimos alguna más o a Steffi Love; que yo recuerde, de Simba hemos tenido varias princesas Disney. La verdad es que me gustaría mucho enseñaros las fotos en las que salimos mi hermana y yo con nuestros juguetes, pero no me gusta publicar esa clase de cosas en la red...
Y ahora sí, después de esta entrada tan extensa, solamente espero que os haya gustado.
