Tarta de Fresa Ginger Snap School Rules de Bandai

¡Hola! Hoy vengo para mostraros mi otra Tarta de Fresa. A diferencia de la de la anterior entrada, esta es mía y se trata de Ginger Snap School Rules, de la colección Berry Special Parties, fabricada en 2003 por Bandai.

Esta muñeca fue un regalo de Papá Noel, probablemente en Navidad de 2003, que llegó a mis manos a la vez que la Tarta de Fresa a mi hermana, que podéis ver en la entrada anterior.

Siempre me ha encantado esta muñeca y adoraba olfatear su melena, con un agradable sabor a canela (aún huele un poco). Es por ello que pensaba que se llamaba Canela, de hecho, siempre la he llamado así; pero, gracias a unas fotos de cajas, descubrí que en la versión española se llama Galletita, lo cual no me esperaba pero, al ver los dibujos de la camiseta y sombrero, vi que tenía sentido.

No conserva los zapatos (cómo no...), pero viste un pantalón largo y ancho de color violeta con bolsillos a los lados y camiseta de manga corta rosa con mangas fucsias, borde inferior amarillo y un dibujo de una galleta de jengibre en el centro.

Su tez oscura la hace adorable, junto a su rostro redondo y sonriente, con nariz pequeña, ojos marrones ovalados y cejas oscuras y arqueadas. 

Su pelo es negro y llega hasta los hombros. Se ve un pelín raro a los lados y es que iba recogido en dos coletas. No recordaba para nada que las llevase, lo descubrí al ver fotos en Internet, así que imaginaos lo que duraron...

El sombrero es uno de los elementos más destacados. Se compone, mayoritariamente, del tejido violeta del pantalón, aunque cuenta con una franja rosa, que presenta una tira ondulada de color mostaza encima. Para rematar, encontramos el mismo dibujo de la galleta de la camiseta. Cabe añadir que las braguitas de esta muñeca son blancas y pintadas. Parece ser que solamente en la primera colección era de tela la ropa interior, o quizá sólo lo fue para Tarta de Fresa...

Esta es la mascota de Galletita, que en España se llamó simplemente Ardilla, como el resto de mascotas (es decir, se llamaban tal y como se llama el animal al que representan), excepto a la gatita de Tarta de Fresa, que sí tenía nombre propio. No obstante, en la versión original este adorable animalito se llama Chocolate Chipmunk.

Siempre he adorado esta figurita, mucho más que a Cremita, el gato de Tarta de Fresa. No sé, es tan rica, con esa carita, el gorro de cocinero, la galleta... No sé cuánto he jugado con ella, pero ya os podéis hacer una idea al ver que la cola se rompió...

Así era originalmente:

(Recuerdo la falda, no sé si aún la conservo, al igual que la mochila, que me da la sensación de que aún sigue en danza por casa)

Fotos: flickr: Starshyne09.

Unas fotos:

Unas fotos en exteriores:

Y ahora, junto a su amiguita Tarta de Fresa:

Y estas dos simpáticas muñequitas se despiden, bien contentas.

Espero que os haya gustado.

¡Hasta la próxima!

Tarta de Fresa de Bandai

¡Hola! Hoy vengo a mostraros una de las muñecas Tarta de Fresa que tengo. Esta concretamente es de mi hermana y es Tarta de Fresa, de la primera colección que fabricó Bandai, en 2002, aunque a España llegaron en 2003.

Si no recuerdo mal, esta muñeca y la otra de la línea fueron regalo de Papá Noel en Navidad de 2003 (o quizá de 2004, porque no sé del todo cuando llegó aquí la mía). Lo que tengo muy claro es que nos las regalaron a la vez y nos hicieron mucha ilusión, en especial el perfume que desprendían sus cabellos.

Aún huelen un poco, pero es un aroma prácticamente imperceptible. Eso sí, aún me permite recodar cómo olían hasta hace relativamente poco. Esta, en concreto, tenía un dulce aroma a fresa (no os engañaré, oler no olía a la fruta) que era irresistible. Es más, yo recuerdo tener la nariz siempre pegada a estas muñecas, ¡jajajaja!

Le faltan los zapatos, así como la chaqueta, que era roja. Luce unos pantalones tejanos largos y una camiseta de manga larga estampada a rayas rosas, fucsias y verdes; con cuello de color rojo.

Uno de los elementos más característicos de estas muñecas son los sombreros así que, cómo no, el de Tarta de Fresa debía ser bien original y vistoso. Se trata de un gran sombrero rosa chicle con fresas estampadas, coronado por un gran lazo con el mismo estampado de la camiseta y una gran fresa; rodeado por una cinta roja.

Su carita es la mar de simpática: redonda, con pómulos marcados, una boca sonriente, pecas bajo la redonda nariz y los ovalados ojos marrones, además de unas cortas, finas y arqueadas cejas. 

Su pelo es pelirrojo y corto, con algo de ondulación, aunque con el paso de los años ha quedado un poco aplastado.

Algo que desconocía por completo era que llevaba ropa interior, ya que nunca le había quitado la ropa (quizá mi hermana sí, aunque yo no lo recuerdo). Se trata de unas braguitas blancas y una camiseta de tirantes del mismo color, con una fresa estampada en el centro.

Esta es la mascota de Tarta de Fresa, Custard en inglés y Cremita en España. Este nombre lo adoptó a partir de la línea de Bandai, ya que en la línea de Kenner de los 80 aquí se llamó Natillas, la traducción del nombre original.

A mi hermana, que es una amante de los gatos, siempre le encantó este adorable gatito. No sé cuántas veces ha participado en nuestros juegos, y es que no solo jugábamos con las muñecas, sino también con las mascotas de ellas y otros animalitos, como los Littlest Pet Shop. Qué recuerdos...

Así era originalmente:

Fotos: gludo.com, pinterest.com, ebay.com.

Unas fotos:

Como Tarta de Fresa es una muñeca tan campestre, no podían faltar las fotos de exteriores:

Antes de terminar, quiero enseñaros algo verdaderamente curioso: una caja de zapatos. Pero no es una caja cualquiera, es la de unos zapatos (concretamente unas deportivas) de Tarta de Fresa.

Por la fecha (2007) y el diseño de los dibujos pertenece a la época de las muñecas de Playmates. El caso es que estos fueron mis zapatos favoritos. Recuerdo cuando fuimos a comprarlos y lo contenta que volví a casa. Lo malo es que no encuentro fotos en Internet para que los veáis porque, acabaron tan destrozadas, que no las conservo. Fueron tan importantes para mí, que la caja aún sigue aquí, después de tantos años.

También me resultó impactante ver la talla (33), ya que ahora calzo un 40-41... ¡Cómo pasa el tiempo! La verdad es que no sé si me las compraron en 2007 o al año siguiente, pero recuerdo las colonias que hice con el casal/esplai en 2008 y lo mal que quedaron al meterme en un campo en el que los hierbajos llegaban por encima de las rodillas, y cómo se me clavaban las espigas por la goma que recubre la parte delantera... Ay, con lo que me gustaban: iba sufriendo para que no se estropeasen aquellas deportivas fucsias con un dibujo de Tarta de Fresa...

Es increíble como un personaje puede evocar tantos recuerdos. La verdad es que me hizo feliz encontrar la caja y trasladarme a aquellos tiempos que parecen tan cercanos y tan lejanos a la vez...

Espero que os haya gustado, en la siguiente entrada os enseñaré mi otra Tarta de Fresa.

¡Hasta la próxima!