lunes, 26 de marzo de 2018

Trollz Amethyst Van Der Troll de Hasbro


¡Hola! ¿Qué tal las ansiadas vacaciones de Semana Santa? Espero que bien.

Hoy vengo a mostraros una de mis muñecas de la infancia: la muñeca de Amethyst (Amatista en castellano) Van Der Troll, la protagonista de la serie de animación Trollz, fabricada por Hasbro.

Esta muñeca, lanzada al mercado en 2005 (y según el molde de la cabeza fabricada en 2004), fue un regalo que recibí en Navidad hace ya bastante tiempo (no sé si en 2005 o 2006)... Recuerdo que a mi hermana y a mí nos gustaba esta serie, así que nos regalaron una muñeca a cada una (la de mi hermana la veréis en la próxima entrada).








Sus zapatos son de quita y pon (como los de las Bratz), planos y de color fucsia, con tiras de color rosa.
En cuanto a su ropa, el conjunto se compone por una falda de tubo corta de color lila con una franja rosa en la parte superior que parece que haga las veces de cinturón. Su camiseta de manga corta es del mismo color que la falda y presenta bordados blancos en la parte inferior, el cuello de las mangas y en el de la camiseta. 

En el ombligo tiene su gema mágica en forma de corazón, de color fucsia.




Su cara es muy particular y característica. Es bastante fiel al personaje de la serie. Su rostro caricaturesco se compone por unos anchos y gruesos labios que esbozan una sonrisa, una nariz chata ancha, unos abiertos y redondos ojos de pupilas moradas y unas finas y arqueadas cejas del mismo tono. Tiene expresión pícara, curiosa incluso.






Su pelo probablemente es lo que más llama la atención desde un principio. Precisamente esta serie de animación está basada en los muñecos Troll que aparecieron en 1959 y llegaron al punto culminante de su éxito en los años 80.

En concreto su cabello es de un tono fucsia que se acerca al morado, liso y que se eleva hacia arriba en forma de llama. Además, tiene unos mechones a los lados de la cabeza.


Os dejo con unas fotos:













(Nos encantaba a mi hermana y a mí hacer esto con nuestras muñecas Trollz de pequeñas.)





Y ahora en exteriores:





















Así era originalmente:





(Que yo sepa solamente conservo el cepillo con corazones y el clip de pelo...)





Fotos: amazon.com, museumofplay.org, flickr: saffy_suppi; hvmag.com.



Así era en la serie:






Fotos: pinterest.de, fanpop.com.



Para terminar os dejo el anuncio de las muñecas, en inglés, de 2005:





Espero que os haya gustado.


¡Hasta la próxima!

martes, 13 de marzo de 2018

Lenci


¡Hola! Hoy vengo a mostraros unas muñecas preciosas, en concreto hablaré sobre una fábrica de muñecas en general: Lenci.

Lenci fue una fabricante de muñecas italiana establecida en Torino (Turín en castellano), creada en 1919. El nombre de la empresa es un acrónimo de la siguiente frase en latín: Ludus est nobis constanter industria (el juego es nuestro trabajo constante).

La empresa fue fundada por Enrico Scavini, quien en 1915 se casó con Elena König, apodada Elenchen cuando se trasladó a Alemania y Lenci cuando regresó a su Italia natal.

Durante la Primera Guerra Mundial, esta mujer trabajó y experimentó con el fieltro, descubriendo sus múltiples posibilidades de uso. Así fue como introdujo la fabricación de muñecas de fieltro en la empresa, que se dedicaba a la producción de figuras de cerámica.

Las muñecas de Lenci estaban producidas en fieltro, cosidas a máquina por la espalda y los hombros, mientras las piernas se cosían a mano al resto del cuerpo. El pelo de las muñecas era de mohair y cosido, mientras los rostros, presionados sobre moldes, tenían las facciones pintadas a mano.

La fábrica producía toda clase de muñecas: niñas y niños pequeños, muñecas con vestimenta regional o étnica o muñecas Boudoir (muñecas de origen francés en la década de los años 20 que se pusieron de moda entre las jóvenes de posición social alta, que colocaban como elemento decorativo en sus camas, dormitorios, o salones; de aspecto adulto, refinado e incluso seductor). También se hacían marionetas, que contaban con cuerpo de madera pero rostro de fieltro.

Los rostros de las muñecas Lenci son el sello de la marca. Cada muñeca tiene una expresión distinta que la hace única e inconfundible: las niñas y los niños pueden tener una mirada triste, melancólica, enfadada, sorprendida... Mientras las muñecas adultas tienen rostro serio, altivo, seductor... En muchas ocasiones basados en actrices y artistas del momento.

Las muñecas de la empresa alcanzaron un éxito enorme, siendo las muñecas más famosas de Italia durante los años 20 y 30, época convulsa por la dictadura fascista. Además, el éxito se hizo internacional en poco tiempo, recibiendo premios en exposiciones internacionales de Zúrich, Roma, París o Milán.

No obstante, desde los inicios de su éxito arrollador apareció una gran competencia dentro y fuera de Italia, que producía muñecas similares de menor calidad y precio. Esto provocó que la empresa desarrollase nuevas ideas, como la renovada y refinada línea de cerámica en 1927, que obtuvo mucho éxito y aceptación entre las clases altas de diversos países europeos.

A pesar de haber una mejora económica en la empresa, la Gran Depresión provocada por el Crac del 29 también afectó a Lenci, junto a la insolvencia de clientes y distribuidores, además de sanciones impuestas por conflictos militares. De esta forma, la empresa que a principios de los años 30 contaba con más de 600 empleados, empezó a desmoronarse.

En 1933 el matrimonio Scavini vendió algunas acciones a un contador de Turín y, a partir de 1934, muchos de los artistas que formaban parte de la empresa decidieron abandonar el negocio para abrir sus propios talleres.

En 1937, Pilade Garella y su hermano Flavio se hacen con el control de la empresa, provocando así que el matrimonio Scavini quede totalmente al margen del que fue el mayor proyecto que emprendieron jamás. Aún así, Elena König seguía siendo la directora artística, hasta que en 1938 muriese de forma repentina su marido.

Los primeros años de la década de los 40 fueron terribles. Los estragos causados por la Segunda Guerra Mundial se hicieron patentes, llegando a su punto culminante cuando, en 1944, la fábrica fue bombardeada.

Después de la guerra, el hijo de Pilade, Beppe, decidió hacer resurgir la empresa, apostando por la creación de muñecos y peluches basados en personajes infantiles de la época, tanto italianos como internacionales; por ejemplo, los de Disney.

Durante los años 50, 60 y 70 la producción regresará a niveles normales, a pesar de que la cerámica que producía Lenci desaparecerá en 1964. Las muñecas de esta época nada tienen que ver con las primeras que se hicieron. Hay líneas en las que las muñecas representan a estilizadas muñecas maniquí, a muñecas de rostro más caricaturesco y fantástico que realista...

Al llegar los años 80, se decidirá lanzar una colección de muñecas limitadas inspiradas en las que hicieron en los años 20 y 30, dirigidas a coleccionistas. Esta línea tuvo bastante éxito, especialmente en Estados Unidos, ayudando a que no se olvidase el legado de la empresa, que la había hecho llegar hasta donde se encontraba.

En 1992, Beppe Garella murió repentinamente, quedando el negocio a cargo de su hija, Bibija, quien decidió respetar las tradiciones pero también expandirse mediante exportaciones. Aún así, en 1997 vendió Lenci a dos empresas: la italiana Bambole Italiane Srl se quedó con los equipos de producción, mientras la portuguesa WestBay obtuvo las marcas, derechos y patentes.

Desgraciadamente, Bambole Italiane cayó en quiebra en 2002, lo que provocó que se cesase la producción de muñecas Lenci, que durante sus últimos años de vida presentaron al público muñecas destinadas a coleccionistas y nostálgicos.

Las muñecas Lenci se han convertido en un símbolo no solo del sector juguetero italiano, sino internacional. También son parte de la historia de Torino, quien ha organizado exposiciones sobre ellas. Estas muñecas, que hoy en día pueden hallarse en museos de todo el mundo, son muy apreciadas y cotizadas por los coleccionistas, constituyendo verdaderas obras de arte.































































































































































































































































































































































































































La fama de Lenci fue tan rotunda, que muchísimas celebridades de la época, tanto italianas como extranjeras, tenían las suyas, como la famosa Marlene Dietrich, a la que parece que se le hizo una muñeca inspirada en su rostro (seguro que habéis visto en esta entrada muchas muñecas parecidas a ella). También la niña prodigio Shirley Temple tuvo muchas en incluso participó en campañas de publicidad de la marca:



















Fotos: pinterest.com, 1909ventilo.me, collectorsweekly.com, dollcabinet.com, ebay.com, juguetessintiempo.blogspot.com, abidolls.com, rubylane.com, serach.aol.com, theriaults.com, livemaster.ru, carmeldollshop.com, voilok.ru-livejournal.com, picssr.com, it.wikipedia.org, stuffnobodycaresabout.com, frauwulf.blogspot.com, marks4antiques.com, lenci-dolls.com, richardsawmanantiques.com, globaltoynews.com, dollreference.com, antiquedollcollector.com, respectfulbear.com, metelmuk.livejournal.com, missemouse.blogspot.com, lenciblog.com, flcikr: dollsformama, tartadefresa, lenci*boudoir*doll*lady, motherxmas2003; skinnerinc.com, jazzageclub.com, statesman.com, todocoleccion.net, imprese.san.beniculturali.it.



Perdón por la cantidad de fotos, pero es que veía necesario poner aquí tanta preciosidad. Ante tanta belleza una no sabe qué decir...


Espero que os hayan gustado.


¡Hasta la próxima!