martes, 21 de agosto de 2018

The Classique Collection


¡Hola! Hoy os voy a presentar a la muñeca que he obtenido durante mis vacaciones.

Pues bien, conseguí esta muñeca cuando fui al mercadillo que se organiza en el pueblo de mis abuelos. Allí vi varias muñecas de Berjusa de los 80 (como Minene de 1981, por ejemplo) o un payaso de Jesmar que no recuerdo si era Puffy o Lucho de 1993; entre otras más modernas.

El caso es que también había pequeñas muñecas de porcelana con vestidos regionales y otras más grandes ataviadas con bonitos vestidos de época. De todas las que vi, la que más me gustó fue la que os muestro hoy, que me regaló mi padre. La verdad es que está en muy buen estado (incluso venía con la peana) y la compró a precio de risa.

Curiosamente, el año pasado mi padre me regaló otra muñeca que compró en el mismo sitio, también de porcelana. La verdad es que no pude evitar asociarlas a las dos, hasta que determiné que ésta también es una muñeca de Alberon.

El caso es que, si visitáis su entrada pinchando aquí , observaréis en los comentarios que la muñeca es técnicamente perteneciente a la colección de los 90 "The Classique Collection", a pesar de que no lleva marca alguna (como la de esta entrada), deduciendo que, aunque en esencia es una muñeca de esa colección, no se vendió como tal en otros países; por lo tanto, no puede observarse el nombre de la colección ni en el de la muñeca, además del número de serie.





Sus zapatos son de cuero negro, que contrastan con sus largos y blancos calcetines, que dejan ver un poco la porcelana de las piernas, hasta que empieza el cuerpo de trapo muy duro.








Debajo del vestido se aprecia una falda de tul blanco, que se ve cubierta por el vestido. Éste presenta en la parte inferior una capa de pana de color ocre verde, cubierta por bordados blancos con motivos florales, que se cosen a la prenda mediante hilo verde y rosa. El resto de la falda está compuesto por tela a cuadros grises, granates y verdes.

El torso se ve cubierto por una camisa a rayas blancas y azules de manga corta con dos grandes botones marrones y blancos, cubierta por una chaqueta de los mismos materiales que la falda, donde predomina la pana, mientras los cuadros se hallan en los bordes. Finalmente, en el cuello de la camisa vuelven a aparecer los bordados florales blancos junto a los hilos verdes y rosas.











Su melena es larga, pelirroja y rizada. Algunos tirabuzones se han conservado bien, aunque otros están desechos y enredados con otros mechones.

El cabello está cubierto en parte por un gran sombrero confeccionado en la pana verde ocre, con los bordes y la parte superior a cuadros, además del lazo lateral. 





Su cara es de lo más dulce. Presenta unos gruesos labios de color coral, nariz chata, preciosos ojos verdes con largas pestañas y cejas pintadas trazo a trazo.



No sé si se puede apreciar del todo bien en la foto, pero hay una incisión en la nuca en la que pone: D 762. Esto me hace confirmar que es de Alberon Dolls pero no fue comercializada como The Classique Collection. Además, no he visto ninguna muñeca de la colección igual, por lo tanto se usaron los mismos moldes pero no la ropa y peinado. 


Unas fotos:














Aquí están las dos juntas. Miden 40 centímetros y sus cuerpos son idénticos: de tela dura con brazos, piernas y cabeza de porcelana. Son muy distintas pero preciosas.

La de ojos azules se inclina todo el rato hacia delante porque lleva unos cuantos meses sentada en la vitrina, pero antes podía mantenerse erguida. Quizá le busque una peana.

***


Para terminar os enseño una muñequita que tengo desde hace bastante tiempo. La encontró mi padre tirada y la trajo a casa.





Tras investigar a partir de la inscripción de su espalda, que señala que es de 1988 (o por lo menos el molde del cuerpo), descubrí que es propiedad de M.I.I. (Meritus Industries INC.) y pertenece a la colección de muñecas llamadas "The adorables" (Los adorables).

Esta línea apareció en 1988 y desapareció en 1992, dos años después de la aparición de la colección de muñecas que se movían mediante cuerda, las Strollers. 

















(Es probable que esta sea la mía)



















Fotos: ebay.com, etsy.com, pinterest.com, sekaimon.com, ghostofthedoll.co.uk.




Como veis es muy pequeñita, ni siquiera encuentro ropa de su medida entre los viejos conjuntos de mis muñecas.

Y la pregunta es: ¿cómo una muñeca estadounidense de finales de los 80 ha ido a parar a la basura española? Es verdaderamente curioso.


Espero que os haya gustado.


¡Hasta la próxima!

4 comentarios:

  1. Qué bonitas son, veo que tu padre es tu colaborador en esto del coleccionismo, jejeje... El misterio de la muñequita seguro que tiene una explicación fácil, será un regalo o se vendría con algún niño de un viaje de ultramar. Mi madre también se encontró una vez una muñeca la mar de bonita en la calle y se la trajo a mi hija. Esa muñeca siempre me da una sensación de misterio que me encanta.
    Feliz regreso :-)

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    1. ¡Hola Ilona! Mi padre, que colecciona juguetes antiguos y demás antigüedades, siempre se implica en mi afición; es algo mutuo y a la vez gratificante.
      Siempre es genial encontrar muñecas en la calle y pensar que se han salvado de ser destruidas. Además, también me gusta pensar en cómo llegó a parar a manos de su anterior dueño.
      ¡Besos!

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  2. Es cierto que es curiosa la procedencia... y curioso también que tu padre esté tan presente en tu colección de muñecas, con regalos y "donaciones", qué majo!!
    La muñeca de porcelana tiene unos ojos divinos con ese color y esas pestañas! Y la otra, tiene un aire americano, me lo pareció cuando la vi, se me pareció a la hermanita de Barbie, no recuerdo cómo se llama.
    Acabo de llegar de Amsterdam (por eso he estado desaparecida) y me resultó muy curioso entrar en una iglesia en un pueblecito llamado Edam donde vendían ropa usada, libros antiguos y ... muñecas! Busqué por si la casualidad me traía alguna de mis favoritas, pero no había muchas: alguna tipo nenuco y alguna tipo lesly pero menos bonita. Pero me encantó verlo, incluso tenían ropa hecha a mano para ellas por allí cerca. Había un grupo de viejecitas tomando té o café allí, de reunión en la iglesia. Chulo, no??
    Besitos

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    1. ¡Hola Rosana! Gracias por compartir esta anécdota. Donde menos lo esperamos, ¡podemos encontrar muñecas (y es que no es una afición tan rara como muchos creen...)!
      ¡Besos!

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